La Real Federación Española de Hockey presenta su Memoria 2024-2025, un ejercicio de comunicación y transparencia en el que se repasan los principales hitos de las áreas que conforman la federación.
Esta memoria pretende recoger proyectos, objetivos y resultados en los que trabaja la federación además de convertirse en un nuevo activo de un modelo federativo más moderno, abierto, profesional y comprometido con su comunidad.
Para desgranar la memoria y mostrar los objetivos conseguidos y los futuros, iniciamos una serie de entrevistas con jefes de área para entender, de una forma más detallada, los principales proyectos en los que trabaja la RFEH. En la primera entrega entrevistamos a Llorenç Arnau, CEO de la RFEH, quien aporta sus reflexiones sobre el presente y el futuro, los retos pendientes y las oportunidades que se abren gracias a la implicación de un equipo humano alineado en torno a los valores del hockey.

Llorenç, es la primera vez que la RFEH publica una memoria anual. ¿Por qué se ha decidido elaborar este documento ahora y qué objetivos persigue en términos de transparencia y comunicación institucional?
Llorenç Arnau: “La memoria es un paso más para consolidarnos como una organización moderna y profesional. No es algo excepcional ni innovador, sino una herramienta que debería formar parte natural de cualquier entidad de nuestro nivel. En realidad, es un ejemplo de uno de los muchos cambios internos que estamos implantando para ponernos al día y que, dentro de poco, nos parecerá algo básico.
En nuestro caso, además, tiene un valor doble. Somos muy conscientes del déficit comunicativo que todavía tenemos dentro del ecosistema del hockey: nos cuesta hacer llegar a nuestra comunidad todo lo que estamos construyendo. La memoria nace también como una herramienta útil para compartir los proyectos más relevantes de cada área y seguir mejorando nuestra comunicación institucional”.
La memoria refleja una Federación más moderna y profesional. ¿Cómo se está gestionando internamente este proceso de transformación y qué cambios estructurales han sido clave para lograrlo?
Llorenç Arnau: “El Plan Estratégico ha sido la brújula de todo este proceso. Nos ha ayudado a definir no solo hacia dónde queremos ir, sino también cómo queremos hacerlo. Apostamos por una Federación ágil, innovadora y con vocación de servicio a toda la comunidad. Tomar decisiones basadas en datos y con criterios objetivos ha sido fundamental. Gracias a ello, hemos podido priorizar proyectos con coherencia y definir un equipo humano alineado con esos valores”.
Deportivamente, 2025 ha sido un año histórico con dos bronces europeos y resultados destacados en la FIH Pro League. ¿Cuál considera que ha sido el factor diferencial en el rendimiento de las selecciones absolutas y cómo se está planificando el camino hacia Los Ángeles 2028?
Llorenç Arnau: “Cuando llegué a la Federación, hace ya más de cuatro años, el área de selecciones funcionaba bien y con estabilidad. Por eso, aunque el alto rendimiento era uno de nuestros ejes estratégicos, no fue lo primero que abordamos. Decidimos centrarnos antes en consolidar la base: la digitalización, la profesionalización y la creación de nuevas áreas como eventos, desarrollo o marca.
Una vez asentadas esas bases, llegó el momento de impulsar el alto rendimiento. Y ahí ha sido clave la incorporación de perfiles como Dani Martín, como Director Deportivo, y César Hernández, como Performance Manager. Su trabajo está siendo fundamental para cambiar la cultura del alto rendimiento en el hockey español, implantar metodologías comunes entre todas las selecciones, definir el perfil y las métricas del jugador y, sobre todo, integrar esta estrategia con clubes y federaciones territoriales. Las medallas de este verano son un maravilloso resultado, pero representan solo el inicio del cambio profundo que estamos construyendo”.

Se destaca el papel del área de alto rendimiento y la profesionalización de los staffs técnicos. ¿Qué nuevas herramientas o metodologías están marcando la diferencia en la preparación de los equipos?
Llorenç Arnau: “Además de lo anterior, uno de los grandes retos está en la gestión del staff técnico. Alrededor de nuestras selecciones hay más de 70 personas implicadas, desde entrenadores hasta fisioterapeutas o médicos. Gestionar bien este grupo es un desafío enorme. No me refiero solo a la parte logística, que está bien organizada, sino a la comunicación y la gestión emocional.
Estamos trabajando para que todos los miembros del staff tengan una experiencia más estructurada dentro de la Federación: canales de comunicación claros, feedback periódico, itinerarios de desarrollo profesional y un mayor sentido de pertenencia. Queremos que se sientan parte de una organización que reconoce su valor y su compromiso con el crecimiento del hockey. Aún no hemos llegado ahí, pero ese es nuestro rumbo”.
Programas como Team España Futuro o el Hockey Summit muestran un claro compromiso con el crecimiento del hockey base y la formación técnica. ¿Cuál es la hoja de ruta para seguir expandiendo el hockey en todo el territorio nacional?
Llorenç Arnau: “El hockey base es el futuro del deporte, y aunque sea una frase que se repite mucho, a veces no somos plenamente conscientes de su importancia. Tenemos un reto serio en la captación de nuevos deportistas jóvenes, y por eso queremos enfocar más recursos y atención en este ámbito.
Nuestra hoja de ruta pasa por reforzar los programas escolares, diseñar propuestas más atractivas para las primeras edades y trabajar de forma coordinada con las Federaciones Territoriales y los clubes. Si conseguimos despertar la pasión por el hockey desde la escuela, estaremos asegurando el futuro del deporte”.

Se menciona un trabajo coordinado con federaciones territoriales y la mejora de infraestructuras. ¿Cómo valora la situación actual de los campos e instalaciones para jugar a hockey?
Llorenç Arnau: “Aquí los avances han sido más limitados. En territorios como Madrid o Cataluña la saturación de campos es altísima y eso frena el crecimiento. Sin nuevas instalaciones no podemos aumentar la base de jugadores, y esa es hoy una de nuestras principales prioridades. Estamos explorando soluciones más sostenibles y viables para las instituciones, como los campos mixtos o los llamados ‘campos secos’. Son alternativas más atractivas para los ayuntamientos y administraciones públicas, y pueden abrir nuevas oportunidades de expansión”.
La RFEH ha experimentado un crecimiento digital notable. ¿Qué papel juega la digitalización en la conexión con nuevos públicos?
Llorenç Arnau: “La digitalización es esencial para conectar con las nuevas generaciones. No hay otra forma de hacerlo. En los próximos meses queremos avanzar en la centralización del tratamiento de datos y explorar herramientas de inteligencia artificial que nos ayuden, por ejemplo, a resolver consultas sobre competiciones o trámites federativos. Esta temporada también estamos trabajando en que toda la DHA puede seguirse en directo y en abierto, un hito que mejora la experiencia de consumo del deporte y mejora su visibilidad. Queremos que la tecnología nos permita ser más eficientes y, al mismo tiempo, estar más cerca de nuestra comunidad”.
¿Cómo definiría hoy la marca RFEH y qué valores pretende transmitir?
Llorenç Arnau: “Estamos en plena transformación, y queremos que nuestra marca refleje ese cambio. Trabajamos en una nueva identidad visual que proyecte una Federación moderna, innovadora y digital, pero que mantenga la esencia y los valores tradicionales del hockey: esfuerzo, compañerismo y respeto. Queremos que quien vea nuestra marca perciba energía, cercanía y orgullo de pertenencia”.
La Copa del Rey y la Reina y la Final Four están consolidados como grandes eventos nacionales. ¿Se prevén nuevos eventos a corto o medio plazo?
Llorenç Arnau: “Sí, tanto la Copa como la Final Four son ya referentes, pero aún tienen margen de crecimiento, sobre todo en su capacidad de movilizar a más público. Este ciclo hemos tenido nuestros primeros sold out, y queremos que sea algo habitual. Nuestra meta es convertir estos eventos en auténticas celebraciones del hockey, abiertas a toda la comunidad.
Además, seguimos atentos a oportunidades que puedan ayudarnos a impulsar el deporte: desde posibles torneos internacionales hasta nuevas fórmulas que acerquen el hockey a más audiencias. Los eventos son una herramienta clave de crecimiento y fidelización”.

La memoria refleja un crecimiento financiero sólido y una gestión sostenible. ¿Qué retos y oportunidades identifica para mantener este equilibrio económico en los próximos años?
Llorenç Arnau: “Efectivamente, los resultados financieros son positivos y reflejan una gestión responsable, pero seguimos siendo muy dependientes de los ingresos institucionales. El gran reto es diversificar nuestras fuentes de financiación y aumentar los ingresos privados.
Tenemos una relación magnífica con el CSD, pero nuestra sostenibilidad a largo plazo pasa por generar más recursos propios a través de patrocinadores, proyectos innovadores y servicios de valor añadido. Ese es el siguiente paso para consolidar una Federación sólida y preparada para el futuro”.

 
								
 
								
