Tras diez años formando parte del cuerpo técnico de la selección absoluta, primero en la masculina y después en la femenina, Edu Aguilar ha decidido cerrar una etapa importante en su carrera profesional y vida personal, la de segundo entrenador del combinado femenino y centrarse en su labor como entrenador del Club de Campo.
Miembro clave del staff en las dos selecciones por su enorme conocimiento y también por la gran humanidad y humildad de la que siempre ha hecho gala, Edu ha sido testigo y protagonista durante estos años del crecimiento del hockey español y de los logros destacados de la última década.

“He tomado la decisión de dejarlo porque ya son 10 años junto a la selección absoluta, 6 con la masculina y 4 con la femenina, más los años anteriores que compartí con las categorías inferiores y en el CAR de Madrid”, explica Edu Aguilar. “Desde la clasificación de los JJOO de Río en Argentina y con el broche de la medalla de bronce de este último europeo femenino en Alemania, se han cumplido varios ciclos olímpicos que han sido increíbles, pero también soy consciente de todas las cosas que he postergado por la selección”, añade.
Durante este tiempo trabajando para la RFEH ha formado parte de un ciclo que incluye éxitos como la medalla de plata con la selección masculina en el europeo de Bélgica de 2019, la medalla de bronce con la selección femenina en el reciente europeo de Alemania, o la intensa vivencia de los torneos preolímpicos y JJOO. “Quizás una espinita que nos quedó fue lo cerca que estuvimos de entrar en semifinales en los JJOO de Río con los chicos, o el Mundial que vivimos en Terrassa con una grandísima organización”, recuerda con emoción.

Edu Aguilar continuará con su labor como primer entrenador del equipo masculino en el Club de Campo y destaca el apoyo constante de su club para poder compatibilizar su labor en la selección con su trabajo en el equipo madrileño. “Durante todos estos años el Club de Campo me ha ayudado muchísimo para poder compaginar las dos posiciones. También los seleccionadores como Fred, Adrian, finalmente Carlos y Raúl como jefe de equipo, y sobre todo el aguante de todas las chicas en estos último cuatro años, es lo que me ha permitido que todo esto pudiera llevarse a cabo durante todo este tiempo. Gracias a ello, he crecido como entrenador y como persona”, comenta.

Consciente del esfuerzo y dedicación que supone formar parte de dos staff’s tan potentes como el de la absoluta femenina y el del Club de Campo, Edu Aguilar siente que es el momento de dar un paso al lado. “Después de tener varias conversaciones, tanto con la RFEH y Carlos García Cuenca como con el Club de Campo, creo que es el momento de dedicar tiempo a otras cosas, recargar energías y disfrutar de la selección como un espectador”, declara.
Durante estos años ha compartido vestuario con jugadores y jugadoras y aprovecha Edu Aguilar para agradecer la relación con “todas y todoss con los que compartí todo este tiempo. Soy consciente del trabajo que conlleva ser jugador de hockey en España y dedicarte a ello en este momento, y para mí es de admirar la dedicación que tienen. Gracias por la entrega aun cuando las cosas no salieron como esperábamos”.

Edu también quiso expresar su gratitud a la RFEH, a su presidente Santi Deo, y a los seleccionadores con los que ha trabajado: “Tengo que agradecer a la RFEH, a Santi Deo y a los distintos seleccionadores por confiar en mí para estar en los diferentes cuerpos técnicos, primero con Fred, Adrian y luego con Carlos”. Y, finalmente, le dedica unas palabras muy especiales a su familia: “Por supuesto y de forma muy especial, dar las gracias a toda mi familia, en especial a Montse, Ignacio y Elisa que siempre me siguieron allá donde estuviera y esperaron después de cada viaje”.
Por último, Edu no cierra la puerta al futuro: “No quiero despedirme de manera definitiva, pero sí un hasta pronto…”.
Desde la Real Federación Española de Hockey queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a Edu Aguilar por su compromiso, profesionalidad y pasión durante todos estos años. Por supuesto por el esfuerzo constante en compartir su conocimiento deportivo durante tantos años y mejorar el hockey español, pero sobre todo por su trato humano en todas las circunstancias.
Gracias, Edu. Hasta pronto.




