Con el dulce sabor de la victoria ante Australia hace tan solo 48 horas, España afrontaba su tercer partido en el Sydney Olympic Stadium. El rival, por segunda vez en esta etapa de la Pro League, era el actual campeón olímpico, Países Bajos, contra quien los RedSticks cayeron por un ajustado 1-2.
El partido comenzó de manera complicada para España, concediendo un penalti córner en los dos primeros minutos de juego que Pepijn van der Heiden transformó para adelantar a su equipo en el marcador (0-1). Poco después, España intentó un contragolpe, pero el conjunto oranje robó la bola y lanzó un disparo estilo coreano que salió desviado. Rafa Revilla tuvo una actuación destacada a falta de tres minutos para el final del primer cuarto, deteniendo un penalti y evitando que la ventaja neerlandesa se ampliara. Poco después, los RedSticks tuvieron su primera oportunidad de penalti córner, pero el disparo de Chefo Basterra no tuvo éxito.
En el segundo cuarto, España salió con una actitud más agresiva. Una excelente jugada de Gerard Clapés por la banda derecha generó la posibilidad de un nuevo penalti córner, pero tras la revisión solicitada por los neerlandeses, la colegiada determinó que hubo juego peligroso. A medida que avanzaba el encuentro, España comenzó a recuperar mejor la bola, logrando conexiones de calidad en los primeros pases y llegando con mayor facilidad a la línea de 22 contraria. Borja Lacalle intentó un lanzamiento in extremis al superar los primeros cinco minutos del cuarto, seguido por un disparo de Pol Cabré. La ofensiva española continuó en aumento, poniendo en aprietos a la defensa neerlandesa. Sin embargo, un error en el medio campo permitió que Holanda llegara con peligro a la portería española, aunque sin consecuencias en el marcador. Al descanso, España se encontraba con una desventaja de un gol (0-1).
Con energías renovadas tras el intermedio, España salió decidida a revertir el resultado y mantuvo una gran circulación de la bola durante los primeros minutos del tercer cuarto. Rafa Revilla volvió a destacar al detener dos penaltis de manera soberbia, pero un error en un pase del medio campo permitió una recuperación de Países Bajos que culminó en gol, ampliando la ventaja (0-2). La primera gran oportunidad para España en este periodo llegó con una jugada iniciada por Pepe Cunill desde el centro del campo, continuada por Gerard Clapés por la banda derecha y finalizada con un potente disparo de Chefo Basterra que estuvo cerca de marcar. Finalmente, el esfuerzo español tuvo recompensa: un gran pase de Pere Amat permitió que Clapés conectara con precisión en el segundo poste para recortar distancias (1-2).
El partido continuó con una dinámica ascendente en el último cuarto, con España buscando con insistencia el empate. Los RedSticks generaron buenas combinaciones ofensivas para acercarse al área neerlandesa, mientras que Rafa Revilla se erigió nuevamente como figura clave al detener dos penaltis más, manteniendo viva la esperanza de su equipo. En los minutos finales, un disparo de Chefo Basterra pudo haber supuesto el empate, pero el marcador no se movió.
Finalmente, España cayó por la mínima ante el vigente campeón olímpico, dejando una gran sensación de juego y entrega. Los RedSticks volverán a la acción mañana sábado a las 7:30 h contra Australia, partido que podrá seguirse en directo a través de Teledeporte.