Cuatro días tenía la selección española para viajar de Bubhaneswar a Rourkela, descansar y preparar el siguiente encuentro de la FIH Pro-League. Esta vez tocaba el segundo encuentro ante los anfitriones, India. En el primer enfrentamiento los RedSticks recibieron demasiado castigo después de perder por 4 goles a 1 realizando un partido más que serio. En esa ocasión fue el primer partido que disputaban, y la falta de efectividad de los españoles permitió a los indios llevarse los tres puntos con una victoria holgada.
La realidad de hoy era totalmente distinta. Una nueva ciudad, un estadio diferente y una selección española que llegaba con mucha confianza después de cosechar su primera victoria ante Irlanda después de realizar unos 60 minutos muy buenos.
El partido se torcía nada más arrancar. Un ‘flick’ en el interior del área, era controlado por Singh que lanzaba a portería y su tiro se colaba entre las piernas de Luis Calzado a los treinta segundos del inicio del partido. (0-1). Sin duda no era el inicio deseado por unos RedSticks qué rápido se repondrían del golpe inicial. Tan solo dos minutos y medio de encajar el gol y a los tres de partido, los de Max Caldas forzaban un PC que era transformado a las mil maravillas por Chefo Baterra, con un arrastre pegado al palo derecho de la portería india (1-1).
Con el partido en tablas en el marcador, las fuerzas se igualaban. España, sin embargo, que venía con la ambición de ganar por segundo encuentro consecutivo iba a imponer rápido su juego, alternando las posesiones largas con transiciones rápidas muy verticales. Y en una de estas rápidas transiciones, una gran jugada entre Marc Miralles y Borja Lacalle, era finalizada por el delantero español batiendo al portero indio por arriba en un primer toque de mmucha calidad. (2-1). Los españoles se iban al descanso con ventaja en el marcador.
Tras el descanso, los locales salieron con una marcha más, pero España no bajó su nivel. Los intercambios eran los protagonistas en los primeros instantes del tercer cuarto. A los cinco minutos de la reanudación, India conseguiría el empate tras una serie de rebotes que no conseguía sacar de su propia área la defensa española y que India conseguía meter en la portería española (2-2). De vuelta con tablas en el marcador se vio la mejor versión del combinado de Max Caldas.
España fue amo y señor del último cuarto. Un cuarto en el que los españoles mostraron su crecimiento y gran madurez. Movieron la bola, aceleraron cuando el juego lo pidió y forzaron hasta 5 PC’S, que alguno de ellos podría haber significado la victoria. Solo la falta de efectividad y la gran actuación del portero indio privaron a España de lograr los tres puntos en el tiempo reglamentario. (2-2). En los shoot-outs, solo un error de Marc Miralles le dio la victoria a India ante una España que volvió a merecer mucho más.
El próximo partido de España será el día 21 de febrero a las 13:00h ante Australia. Se podrá seguir por Watch.hockey.