Joan Ramon Avilés y Joan Ramon Giménez han alternado la portería del Atlètic esta temporada en DHAM y hemos planteado la entrevista previa a la Final Four de Terrassa de la misma forma: alternando preguntas y respuestas a ambos. Esto es lo que nos han contado.
Hola Joan Ramon, ¿Cómo analizas la temporada del Atlètic?
AVILÉS: “Ha sido una temporada muy sólida. Desde el inicio sabíamos que teníamos un equipo competitivo. Hemos trabajado mucho para llegar bien a esta Final Four y creo que el grupo ha crecido a nivel mental y táctico. Hemos tenido momentos difíciles, pero el equipo siempre ha respondido con compromiso, trabajo y carácter”.
¿Cómo llegáis a la Final Four?
GIMÉNEZ: “Llegamos a esta cita con mucha confianza y la ambición de demostrar todo lo que hemos trabajado a lo largo de la temporada. El equipo ha crecido mucho durante el año y estamos preparados para competir al máximo nivel. Queremos cerrar la temporada de la mejor manera posible, levantando el título”.
¿Cuál crees que será la clave para llevarse el título?
AVILÉS: “La clave será mantener la concentración en los pequeños detalles. En una Final Four cualquier error se paga caro, así que la solidez defensiva, aprovechar nuestras ocasiones y no perder la concentración en momentos de presión será fundamental. Además, confiar en nuestro juego será determinante”.
Muchos dicen que hay que estar un poco loco para ser portero/a. ¿Estás de acuerdo?
GIMÉNEZ: “No creo que la palabra sea ‘loco’. Ser portero implica asumir mucha responsabilidad. Hay que tener una mentalidad fuerte y no tener miedo a ponerse bajo los palos. Pero al final, el objetivo es el mismo que el de todo el equipo, y hay que ir todos a una”.
¿Qué te motivó a ser portero y no jugar en otra posición?
AVILÉS: “Todo empezó cuando en el equipo nos turnábamos para ser el portero, uno diferente cada fin de semana. Cuando me toco, vi una forma diferente de disfrutar del deporte, porque a lo mejor no participas tanto en el juego, pero cuando participas es en acciones claves y eso da un subidón de adrenalina que en otras posiciones tal vez no puedas experimentar. Eso me enganchó.
GIMÉNEZ: “Yo empecé siendo portero de fútbol cuando era pequeño. En cuanto tuve la oportunidad de elegir posición, tenía claro que quería estar bajo palos. Es algo que se lleva dentro. Una vez lo pruebas, sabes si es para ti. Más adelante me pasé al hockey y no tuve dudas de que lo mío seguía siendo la portería.
¿Qué es lo más difícil y lo más gratificante de tu posición?
GIMÉNEZ: “Lo más difícil es la parte mental, porque es una posición con mucha responsabilidad. Un error puede significar un gol en contra, y eso hay que saber gestionarlo. Lo más gratificante es poder ayudar al equipo desde atrás con paradas importantes, esas que levantan la moral y pueden marcar la diferencia sumando puntos”.
¿Cómo es tu relación con la defensa del equipo? ¿Hay mucha comunicación durante los partidos?
AVILÉS: “La relación con la defensa es fundamental. En el equipo nos centramos mucho en la comunicación constante, tanto verbal como gestual y creemos que eso es clave para anticipar situaciones o corregir posiciones. La confianza mutua hace que podamos reaccionar rápido y mantener el orden cuando el rival aprieta”.
¿Tienes alguna rutina o superstición antes de cada partido?
GIMÉNEZ: “No soy especialmente supersticioso. Lo que sí tengo son algunas rutinas y ejercicios que me gusta hacer siempre en el calentamiento, no por superstición, sino porque me ayudan a prepararme y concentrarme para el partido”.
¿Cómo te recuperas mentalmente después de encajar un gol?
AVILÉS: “Antes me costaba más, pero con la experiencia he aprendido a resetear rápido. Me enfoco en la siguiente jugada, respiro profundo y trato de analizar qué pasó sin quedarme enganchado. Saber que el equipo confía en ti ayuda mucho también”.
¿Cuál ha sido la parada de esta temporada que más recuerdas? ¿Y de tu carrera?
AVILÉS: “Para mí fue la parada de esta temporada contra el Junior en un penal en contra en el último minuto, ya que era un momento decisivo para poder conseguir unos 3 puntos muy importantes”.
GIMÉNEZ: “Quizás me quedaría con una parada con el stick frente al Junior en la primera vuelta, con el partido muy ajustado y que terminamos ganando por la mínima. Fue un momento clave. De mi carrera, tengo varios recuerdos especiales. Uno de ellos fue en mi segundo año jugando a hockey: fuimos a shoot-outs en la final de liga y terminé parando el stroke decisivo que nos dio el título. También guardo con cariño una parada en la final del Campeonato de Cataluña en categoría juvenil: a los pocos minutos de empezar salvé un mano a mano y acabamos levantando la copa. Aun así, espero que la parada más importante de mi carrera esté por llegar”.
¿Tienes algún referente o ídolo como portero/a en el hockey? ¿Y de otro deporte?
GIMÉNEZ: “Desde que empecé con las guardas, siempre me ha gustado fijarme en porteros top. Uno de los que me gusta mucho es Vincent Vanasch. Me gusta su estilo y como ha mantenido un gran nivel durante tantos años”
AVILÉS: “En el hockey siempre me he fijado mucho en David Harte. Y en fútbol siempre me gustó mucho Buffon”.
Describe tu estilo como portero/a en tres palabras.
GIMENEZ: “Rápido, inteligente e intenso”.
Si pudieras dar un consejo a un niño/a que quiere ser portero, ¿cuál sería?
AVILÉS: “Que lo disfrute y no tenga miedo a equivocarse. Ser portero es un reto, pero también una posición muy bonita y especial. Hay que tener paciencia, aprender cada día y confiar en uno mismo. Y, sobre todo, pasarlo bien con el equipo, porque al final eso es a lo que venimos, a divertirnos”.