Con tan solo 22 años, Jana Martínez ya sabe lo que es ganar una Liga Iberdrola o participar en un mundial con la selección española absoluta. Intentará reeditar el título conseguido en el mismo Martí Colomer, lo que supuso la primera liga para el equipo de Sant Cugat.
Jana, ¿Cómo analizas la temporada del Junior?
JANA MARTÍNEZ: “Empezamos con un equipo nuevo, con 7-8 incorporaciones y un nuevo proyecto. Al principio empezamos con altibajos, pero es normal al tener que acabarnos de conocer entre todas. Creo que el tercer puesto en la Copa de la Reina fue un proceso de aprendizaje y experiencia para todas y nos ha hecho valorar el privilegio que hemos tenido estos últimos años de poder jugar varias finales del campeonato. Hemos apretado en este tramo final de temporada para poder conseguir una plaza en la Final 4 y veo al equipo muy feliz de poder disputarla un año más”.
¿Cómo llegáis a la Final Four?
JANA MARTÍNEZ: “Ahora creo que llegamos a un gran nivel para la Final 4 y vamos a seguir trabajando los pequeños detalles para poder competir de la mejor manera para poder llevarnos el título”.
¿Cuál crees que será la clave para llevarse el título?
JANA MARTÍNEZ: “Una cosa importante que diría es cuidar de los detalles, al final es un deporte en el que en diez segundos te puede cambiar el resultado, y ya hemos sido testimonios en un par de ocasiones de esto. Lo segundo y más importante diría que es saber competir. No gana el que juega mejor ni el que tiene mejores jugadoras, sino el equipo que compite mejor y marca más goles. Sería lo ideal que podamos ganar jugando bien, pero al final te llevas el título si eres más eficaz que el contrario”.
Muchos dicen que hay que estar un poco loco para ser portera. ¿Estás de acuerdo?
JANA MARTÍNEZ: “Sí que es verdad que los porteros acostumbramos a estar un poco locos (quién se pondría a parar una pelota que va a más de 100 km/h por placer si no le faltara alguna tuerca en la cabeza jajaja) pero también creo que es la posición más cerebral del campo. Tenemos que estar tranquilos para poder tomar las mejores decisiones, ya sea en forma de parada o dar información táctica a tus jugadores. El portero está sereno ante el “peligro” para poder salvar al equipo en momentos difíciles, de la misma manera que el delantero centro, por ejemplo, marca los goles para el equipo”.
¿Qué te motivó a ser portera y no jugar en otra posición?
JANA MARTÍNEZ: “Esta historia me encanta explicarla porqué me encantaría decir algo super inspiracional, pero la realidad es que mi hermana mayor jugaba a hockey de portera y veía que era muy buena y yo, como buena hermana pequeña, me puse celosa y decidí hacerme portera también. Muchas de las cosas que uso las aprendí de ella. Hoy por hoy puedo decir que no salió nada mal la jugada jajajaja”.
¿Qué es lo más difícil y lo más gratificante de tu posición?
JANA MARTÍNEZ: “En lo más difícil diría dos cosas que al final se juntan: los entrenos y los partidos en los que te encuentras más de “espectadora” que de jugadora. Al final todo el mundo quiere jugar y formar parte del juego, pero hay veces donde no es posible, pero forma parte del oficio. Lo más gratificante es sentir confianza en lo que haces y ver que lo que te has pasado 10.000 horas entrenando y que parece fácil, te sale en un partido o entreno de manera automática. Y aunque nadie lo piense, tú sabes por qué es tan importante que lo hayas hecho bien”.
¿Cómo es tu relación con la defensa del equipo? ¿Hay mucha comunicación durante los partidos?
JANA MARTÍNEZ: “Ha sido una relación que ha ido de menos a más, simplemente por el hecho de tener nuevas incorporaciones con un peso importante en el equipo que han tenido que ir aprendiendo nuestro modelo de juego. Hemos tenido además la suerte de recuperar a Clara Pineda y Marta Lamoglia que son defensas con un rol imprescindible al tener la experiencia de juego y con una toma de decisiones muy inteligente”.
¿Tienes alguna rutina o superstición antes de cada partido?
JANA MARTÍNEZ: “Tengo una rutina que puedo seguir esté donde esté y que siempre puedo realizar. Escucho 20 minutos de música, suficiente para centrarme, pero no para desconectar. Me tomo dos cafés con leche: el primero caliente, el segundo con hielo y previo a la charla para poder hablar con mis compañeras. Una vez ya caliento dejo de hablar y me centro en que mis movimientos sean fluidos. No creo en las supersticiones la verdad, si no estaría constantemente preocupada por si sucede o no jajajaja”.
¿Cómo te recuperas mentalmente después de encajar un gol?
JANA MARTÍNEZ: “Creo que es algo en lo que tengo que seguir trabajando porque es la parte más difícil de ser portera. Pienso sobre lo que he hecho y si podría haber hecho otra cosa y lo siguiente que hago es centrarme en el plan de partido porque me permite poner el foco en el juego de nuevo. Pero si es un golazo a veces toca aplaudir al rival”.
¿Cuál ha sido la parada de esta temporada que más recuerdas? ¿Y de tu carrera?
JANA MARTÍNEZ: “De esta temporada diría que el partido de ida frente al Egara en el Pla del Bon Aire, un látigo cercano a zona de 7 metros, y ha sido la que más me ha gustado por cómo me hizo sentir después de pararla. Estaba tranquila en el momento del tiro. De mi carrera tengo unas cuantas, pero de mis preferidas diría que el partido de EHL contra el Amsterdam hace tres temporadas”.
¿Tienes algún referente o ídolo como portera en el hockey? ¿Y de otro deporte?
JANA MARTÍNEZ: “Del hockey siempre he intentado coger cosas que me gustan de todos los porteros. Uno que me encanta por su personalidad es PR Sreejesh, de India, y ha sido una figura deportiva espectacular para el país. De otros deportes diría que Novak Djokovic, porque a mi padre siempre le ha gustado el tenis y me acabó enganchando a él. Aunque Rafa Nadal es un tenista impresionante siempre me ha gustado Novak.
Describe tu estilo como portero/a en tres palabras.
JANA MARTÍNEZ: “Agilidad, alegría y técnica”.
Si pudieras dar un consejo a un niño/a que quiere ser portero/a, ¿cuál sería?
JANA MARTÍNEZ: “Disfrutar de lo que haces te hará mejor jugador y mejor persona. Controla lo que puedas controlar y deja que el resto fluya”.